Eros & Psique (2)

"Cuando esté dormido córtale la cabeza con este cuchillo". Llegó la noche y con ella el amor de su marido y después el sueño. Pero Psique no conseguía conciliar el sueño, amaba a su marido pero la curiosidad era muy fuerte. Sacó el cuchillo y una lámpara de aceite. La encendió y la acercó despacio al rostro de su amor dormido. Era... el propio dios Cupido. Una caliente gota de aceite calló sobre Cupido que se despertó sobresaltado. Al sentirse traicionado le gritó a su mujer: "Llora, sí. Yo desobedecí a mi madre Venus desposándote. Me ordenó que te venciera de amor por el más miserable de los hombres, y aquí me ves. No pude yo resistirme a tu hermosura. Y te amé... Que te amé, tú lo sabes. Ahora el castigo a tu traición será perderme".
Al final la cólera de Venus se fijó sobre ella que la encerró con sus criadas Soledad y Tristeza sin importarle en hijo que llevaba en su vientre.
Venus decidió someterla a unas duras pruebas pensando que no sería capaz de superarlas. La última era la más difícil: tenía que bajar a los infiernos y coger una cajita que contenía la belleza eterna. A mitad del camino decidió ponerse un poco cayendo muerta al instante. Por suerte su Amor acudió para ayudarla y le pidió que le llevara la caja a su madre que él intentaría arreglarlo todo.
Tras la petición de Cupido a Zeus, éste decidió que podían vivir juntos y llevó a Psique al Olimpo haciéndola inmortal. De este modo los amantes pudieron disfrutar de su amor sin nada que ocultar.